lunes, 25 de marzo de 2013

Sonido y psique

La consideración del sonido como evento muestra una entidad física independiente y constituida de cualidades particulares, a diferencia de ser considerado como una cualidad constitutiva de las cosas –como el color y la forma–. Ante la percepción, el sonido no sólo es una extensión del estímulo de la materia –algo que suena–, sino un fenómeno de la realidad física que es energía, cuyas cualidades intrínsecas derivadas de su origen, así como su movimiento, le confieren un alto grado de autonomía, acercándolo a una manifestación de vitalidad.

Creemos posible que estas cualidades sonoras, que en su conjunto conforman el fenómeno acústico arriba descrito, pueden establecer puntos de conexión o afinidades con cualidades y manifestaciones constitutivas de la psique. Si como dijo James Hillman, "[l]as imágenes de la fantasía son a la vez la materia prima y los productos finales de la psique", el fenómeno sonoro, al ser percibido como tal, puede encontrar un paralelismo y relacionarse con las fuerzas, cualidades y movimientos de dichas imágenes –esto es, con el mismo proceso constitutivo de la psique–, estableciendo el potencial para lograr estímulos significativos.